A partir de este jueves, la Dirección de Seguridad Pública de Mexicali, implementará un operativo de seguridad y vigilancia de los restaurantes y zonas comerciales de la ciudad por la celebración del Día de las Madres.

El jefe policiaco, Pedro Ariel Mendívil, declaró este miércoles que para ejecutar el operativo se coordinaron con la CANIRAC y desde este jueves recorrerán los restaurantes de la ciudad. El operativo se intensificará el viernes, reforzando la vigilancia y presencia policiaca en los puntos de mayor concurrencia, como lo son los restaurantes.

Anticipó que habrá presencia de la policía municipal en estas áreas desde la mañana hasta la noche, para garantizar la seguridad de los comensales.

Para fortalecer la capacidad y la inteligencia de la Policía Municipal de Mexicali, 30 elementos de la corporación recibirán un curso a través de la agencia antinarcóticos y aplicación de la ley del consulado de Estados Unidos.

Lo anterior informó el director de Seguridad Pública Municipal, Pedro Ariel Mendívil. Dicha capacitación será a través de Calea y el curso es sobre inteligencia y contrainteligencia a través de la Policía Nacional de Colombia.

“Esa corporación va a estar un mes con nosotros certificándonos con curso especializado aplicado a la seguridad pública. Hoy me acompañan dos superintendentes y es parte de las gestiones binacionales que hemos realizado con Estados Unidos”, manifestó.

La experiencia de la Policía Nacional de Colombia servirá para fortalecer la estrategia en el uso de las inteligencias para poder combatir a la delincuencia común y organizada, precisó.

Por su parte, el intendente Luis Alberto Castro, de la Policía Nacional de Colombia informó que están en Mexicali para el curso de inteligencia y contrainteligencia, el cual es aplicable a las áreas donde se hagan análisis estratégicos para asegurar la seguridad ciudadana.

Se trata de acciones de prevención en las áreas ambiental, niños, infancias y adolescencias, narcotráfico y aduanas, refirió.

La fiscal general del estado, María Elena Andrade Ramírez, explicó que se resolvió con celeridad el caso de la desaparición de los extranjeros porque este evento se dio en circunstancias diferentes al resto de las desapariciones en el estado.

Relató que desde el 27 y 28 de abril empezó a circular por las redes sociales la noticia de la ausencia de los dos australianos y el estadounidense, aunque no se tuvo denuncia hasta el 30 de abril.

Debido a que ya indagaban el caso desde las primeras señales, se pudo avanzar, y gracias al uso del teléfono celular de una de las víctimas pudieron desentrañar el caso.

La fiscal indicó que el fin de semana recibió a las familias de los jóvenes, quienes venían acompañados por autoridades diplomáticas de Australia y el embajador de México en aquel país, así como elementos del FBI.

Manifestó que la comitiva agradeció a las autoridades las atenciones y celeridad del gobierno mexicano para la resolución del caso. Este martes los cuerpos cruzaron la frontera hacia Estados Unidos y desde aquel país los hermanos serán llevados hasta Australia.

Precisó que hay 3 personas sometidas a investigación, dos por posesión de metanfetaminas, mientras que la persona que al parecer disparó, tiene antecedentes por robo de vehículos, violencia intrafamiliar y narcomenudeo.

El móvil del crimen fue el robo de vehículo, que se salió de control y terminó con la vida de los tres extranjeros. Al parecer opusieron resistencia y no consideraron que los atacantes tuvieran armas letales, dijo Andrade Ramírez.

Los cuerpos difícilmente hubieran podido ser encontrados si no hubieran realizado las investigaciones de forma prematura, pues estaban en un pozo de 15 metros de profundidad, tapado con tablones y ramas y en zona muy remota sin señal para comunicación.

El cuarto cuerpo corresponde al velador del lugar, quien fue asesinado semanas antes de los jóvenes por el estado de descomposición en que se encontraban los restos, declaró. Los jóvenes tenían impactos de arma de fuego en la cabeza, y otras lesiones que no pudieron establecer por el estado en el que se encontraban los cuerpos.